CRUELDAD MANIFESTADA.

El 7 de Octubre de 1923 nació Irma Grese. Su nombre pasa a la historia como una de las asesinas del régimen nazi. Hija de un lechero disidente del Partido Nazi, vivió a los trece años la muerte por suicidio de su madre, la cual la dejo huérfana junto a sus tres hermanos. Grese dejo la escuela a los 15 años ya que no le interesaban los estudios, estaba mucho más inclinada a participar en la Liga de la juventud Alemana. Trabajo en una granja, en una lechería y en un sanatorio de las SS. En el que estuvo dos años intentando graduarse como enfermera sin conseguirlo. En el año 1942, la Oficina del Trabajo del Tercer Reich envió a Grese a trabajar en el campo de concentración de Ravensbrück, en donde comenzó con tareas administrativas. Su trabajo fue tan serio y responsable que la llevo a un ascenso vertiginoso, primero la enviaron al campo de Bergen-Belsen, cerca de Hannover, finalmente fue a Birkenau al campo de Auschwitz donde permaneció hasta el final de la guerra. Principios de 1943, el amanecer alumbra un día más el centro de mayor exterminio de la historia del nazismo, Grese se levanta temprano y contempla su figura en el espejo, posee una excepcional belleza de la que es consciente, todo en su atuendo debe ser perfecto; el uniforme, las botas altas, una pistola y un látigo hecho especialmente para ella. Antes de salir, apaga una pequeña lámpara de noche, tiene tres del mismo estilo, piezas únicas, hechas de piel humana de tres prisioneras judías, despellejadas por ella misma. Entonces sale, yendo hacía la entrada del campo para recibir otro cargamento de “basura humana”: judíos, gitanos, homosexuales y demás prisioneros llegan asustados y agotados, ninguno puede imaginar que tras ese hermoso rostro se esconde “el ángel de la muerte”. Por sus dotes de mando, su fanatismo nazi y su especial crueldad, fue nombrada encargada superior y responsable del campo C, donde se apiñaban 30.000 prisioneras en 62 barracones destinados a acoger un máximo de 3.000. El campo estaba sobrecargado y se tenia que “limpiar” constantemente, para lo cual Grese se empleaba a fondo. Muchas de las prisioneras se escondían debajo de sus camastros para pasar inadvertidas, Grese las encontraba y a golpes las arrastraba de nuevo a la fila, donde las dejaba horas de pie o de rodillas, con pesadas piedras sobre la cabeza. Después seleccionaba a aquellas que todavía conservaban algo de su belleza haciéndolas blanco de sus fechorías. Disfrutaba pegando a sus victimas en los pechos, en ocasiones hasta la muerte. Según G. Perl médico de los prisioneros confeso: “Grese gustaba de azotar con su fusta en los senos a jóvenes bien dotadas, con el objeto de que las heridas se infectaran, cuando esto ocurría, yo tenía que ordenar la amputación del pecho de la prisionera, lo cual se realizaba sin anestesia. Entonces, Grese se excitaba sexualmente con el sufrimiento de la mujer”. Utilizaba a las prisioneras como objetos sexuales, practicando todo tipo de mutilaciones y vejaciones para satisfacer sus fantasías eróticas y sádicas. Mantenía relaciones con hombres y mujeres por igual, y no dudaba el hacerlo también con prisioneros. No se sabe realmente cuántas muertes causo Irma Grese a lo largo de su terror y dominio en los campos de concentración nazis, pero se cree que como media fueron 30 muertes por día. El 15 de Abril de 1945, fue detenida por los soldados ingleses, durante su juicio, entre Septiembre y Noviembre del mismo año, negó todas las acusaciones, pero jamás renegó del nazismo ni de su ideología. De hecho pasaba el tiempo en su celda cantando himnos de las SS. Fue condenada a la horca y ejecutada el 13 de Diciembre de 1945, en Hamelín, Alemania, colgada a manos del verdugo británico Albert Pierrepoint, al cual dirigió sus últimas palabras: “Rápido”. Al morir tenia apenas 22 años, fue la más joven condenada a muerte por las leyes británicas en el siglo XX. ¿Que hace que una persona pierda la humanidad de esa forma?. Todos tenemos el bien y el mal en nuestro interior, lo que en mi opinión nos puede hacer mejores seres humanos es el equilibrio entre ambos. Grese dio rienda suelta al desequilibrio del “mal” alimentado por el poder y la crueldad, sin duda producto de sus muchas frustraciones e incultura, lo que aprovecharon “individuos” sin conciencia para anularle cualquier sentimiento humanitario. La información de los sucesos ocurridos no debe de ser solo para juzgarlos, sino para aprender de ellos y que no se repitan. Alberto Vázquez- Figueroa en su nueva novela, La bella bestia nos relata el paso por la vida de esta joven, que aunque fue corto, dejo tras de si todo el horror del lado más oscuro de la humanidad. Carmen.