Saber comunicarse

Una forma de comunicarnos para encontrar soluciones.

Robert Dilt en su libro El poder de la palabra, relata un cuento sobre un paciente ingresado en una clínica psiquiátrica que se creia Jesucristo. Este paciente pasaba los días sin hacer nada productivo, divagando en su delirio y fastidiando a los demás pacientes. Los intentos de los medicos por sacarlo de sus delirios habían fracasado, la medicación lo único que conseguia era hundirlo más en su trastorno.
Un día aparece un nuevo psiquiatra en escena. Durante unos días se dedica a observar al paciente en silencio, hasta que por fin se acerca al joven y le dice: "Tengo entendido que tiene usted alguna experiencia como carpintero". El paciente sorprendido le replica:"Pues....sí, supongo que sí". El psiquiatra entonces le explica que están construyendo una nueva sala de juegos en la clinica y que necesitan la ayuda de alguien que sepa de carpintería. "Nos encantaría contar con su ayuda", dice el psiquiatra. "Quiero decir, si usted es una de aquellas personas a las que les gusta ayudar a los demás".
Y la historia termina bien. El paciente se involucra en el proyecto, vuelve a interactuar con la gente y logra recuperarse, saliendo del hospital y encontrando un trabajo.
A veces trabajando con las metaforas podemos ayudar a los demás a cambiar o modificar sus problemas en la vida cotidiana, haciendo que la vida sea más serena y armónica.
Carmen.